jueves, 28 de febrero de 2013

El León Negro

Un león negro a caído en la jungla, un gran león negro....

No ha muerto... ha caído, ha caído en esta gran jungla de artimañas y desafío...

Ese gran León negro que podía comunicarse con cualquier súbdito y podía ser tan empatico a las necesidades de cada uno de los suyos, líder entre los líderes de fuertes convicciones, metas y objetivos....

Hubo un momento que todo mundo admiraba su presencia, llena de magia y de sabiduría  y que el día de hoy es desterrado de todo el reino que el construyo y ahora que es rey sin reino divaga solo y deambula como un fantasma entre senderos obscuros y luminosos que el ayudo a construir, pero que el día de hoy son tan desconocidos y desconcertantes para el.

Algún día tuvo todo lo que quiso.. amigos, amor, respeto, metas, caridad y que ahora solo  carga recuerdos de malos actos cometidos.

De que le sirvió su conocimiento y su sabiduría, de que le sirvió su agudo sentido del oído, su gran capacidad visual, su enorme gusto por los sabores, su admiración hacia el tacto y su atinado gusto del olfato si le fallo al más común de los sentidos... el sentido común.

Su manada se ha dispersado, buscando nuevos lideres, buscando otros refugios, avergonzados de su líder y manchados con la vergüenza del León negro..

Unos en vez de respeto le tienen lastima, otros apuestan a que va a regresar al reino con un León nuevo y renovado, lo cierto es que en este momento tan fantasmal es su figura nadie lo reconoce, solo aquellos que fueron atrapados por el eco, pero que pocas veces se ha dejado ver en publico.

Convertido en lo que más odiaba, carga su cruz de espinas con el anhelo de regresar a su esencia que le dejó la vida misma, que el sabe que el cielo le regalo para que hiciera buen uso y que ahora es cuestionado como una rendición de cuentas por dios.

Sus metas se han convertido en cuestiones básicas, poder comer, dormir y caminar. Al parecer ni el mismo sabe de la capacidad que tiene para revertir todo el daño provocado, ni lo quiere saber ya que la culpa lo mantiene en un estado neutral, de sobre vivencia solamente...

Los animales carroñeros se aprovechan y tratan de invitarlos a los suyos, pero el prefiere apartarse de lo bueno y de lo malo, al fin y al cabo no tiene nada que perder ni nada que ganar en este momento, prefiere la soledad y que su única herramienta es su saliva que el aplica en sus heridas.

Sabiendo que toda oportunidad de fe a muerto con tanto que se le dio y no lo aprovecho, escuchando a aquellos viejos Leones que algún día fueron consejeros de su reino y que nunca dejarán de serlo, pero que ellos mismo tratan de que retome su rumbo, un rumbo de disfrutar la vida, un rumbo de responsabilidad y honestidad.

Un León negro a caído, tal vez es la peor de sus caídas, pero en el fondo sabe que aunque no es feliz sin reino, hará lo correcto como si ningún pecado hubiera cometido con la falsa esperanza en el aire pero desintoxicación de su alma....  

   

El gato y las palomas

En la esquina de la calle España y Andares en la colonia España, se encuentra una tortilleria, de la cual siempre que paso alrededor de las 16:30 hrs, atrás de la cortina de fierro recargada en la pared, se encuentra un gato de color gris plomo.

Este minino le encanta sentarse en posición de ataque a esa hora, ya que del otro lado de la acera se encuentra una carpintería con un jardín en medio de un patio del cual bajan palomas a tomar agua y comida a las 16:00 hrs.

El gato no hace ni el mas mínimo ruido, no puede perder la concentración un pequeño descuido podría ser fatal para su cometido, poco a poco se va acercando a la carpintería buscando no ser visto ni escuchado, de pronto a escasos metros trata de cazar una paloma pero estas responden más rápido que la astucia del gato, por lo que ellas vuelan a la parte superior de un tejaban de la misma carpintería y empiezan a cantar burlándose del pobre gato.

El gato confiado las voltea a ver y se retira diciéndose hacia sus adentros mañana será otro día, mañana será.....

jueves, 21 de febrero de 2013

Mi cigarro y Yo

¿Qué porque fumo? Será por la necedad de encontrar un placer prohibido en algo que no afecte a nadie más que no sea a mí.

 Porque siento que en cada exhalar de mi cigarro, encuentro olvidar un recuerdo de algo que hace daño y que no puedo contarle a nadie, ni siquiera a mis ojos que los cuales lavarían indudablemente mi sensación de no estar en ningún lugar.

Será que ese narcótico sabor me hace insensibilizar mi sentido del gusto y del olfato y provoca en mí una magia de final que nunca regresará.

 Porque cada vez que lo pienso el alma también necesita alimento y lo que no se canta y se dice se vuelve humo en el viento. 

Será que no me duele la muerte cuando estas en el limbo y si caigo del cielo caigo en una nube de un amigo mortal que me arropa y aunque no me dice nada me escucha y comprende cada palabra que le susurro poco a poco hasta que se duerme en un sueño negro y sin vida después de cumplir su misión. Y como dice mi amigo kevin Johansen…..tengo que decir a mi pesar que seguís siendo mi mejor compañero…..


martes, 19 de febrero de 2013

Morir



He muerto más de 10,000......

Muero cada día.

Muero cada noche.

Muero cuando mis ojos te pierden por instantes en el tiempo, y después te vuelvo encontrar cautivando al mundo con tu sonrisa aunque estés encarnada en otra persona.

Muero cuando mis recuerdos no son suficientes y pierdo siluetas al anhelar.

Muero con esa melodía de la cual puedo disfrutar el aroma y saborear los colores.

Muero por esa rabia de realizar lo correcto y no sabiendo que lo me hace feliz es olvidado por ello.

Muero cada vez que fumo mi alma y la disperso ante los cielos buscando algo que tengo enfrente de mí, pero que mi orgullo y mi inocencia no me dejan soltarlo de las manos.

Muero por el gusto de morir y así volver a vivir y disfrutar de todo lo que me hace daño, porque en cada deterioro en esta vida existe la esperanza de perder la cabeza y realizar ante los ojos de luz lo inimaginable para el corazón.


viernes, 15 de febrero de 2013

El Hombre de las Mariposas




Cerca de mi casa a unas cuantas cuadras, alrededor de las 8 de la mañana siempre veo a la misma persona, un anciano de bastante edad que busca entre la basura, tal vez plástico y cartón que vender o algún tesoro desechado por la gente.

El anciano siempre se ve con una serenidad inmensa y a pesar de que se encuentra sobre una de las avenidas más importantes y congestionadas de esta ciudad, al parecer a él, el ruido no le hace efecto alguno de intranquilizarlo, es más muchas veces llegue a pensar que era sordo; para mi sorpresa un día que pase junto a él, lo saludé amablemente a lo cual respondió de la misma forma y moviendo un sombrero de paja que tenía aquel día.

Normalmente en la acera de enfrente yo tomo el camión que me llevará a mis actividades diarias y me da la posibilidad de observarlo mientras llega mi trasporte.

Siempre llega con un carrito como se supermercado en la parte inferior lleva comida, agua y bolsas de diferentes colores llenas de tiliches, en la parte superior es donde pone el cartón el platico y demás cosas que posiblemente después venderá.

Algo interesante es que llega solo al contenedor de basura, pero cuando el anciano se introduce dentro llegan dos perros Alaska blancos y de sientan aún lado de su carrito. Uno de los perros tiene un ojo de color verde y el otro blanco, mientras que el otro perro  tiene un ojo verde y el otro negro.

Cuando el señor termina su labor en ese contenedor, de una de las bolsas inferiores a su carrito, saca mariposas blancas y las empieza aventar hacia los carros que van en movimiento, los conductores ni siquiera notan la presencia del señor y menos de las mariposas, pero he observado que cuando una mariposa toca un carro en movimiento, la persona baja su velocidad y se le ilumina la cara, casi, casi podría jurar que hasta sonríen.

Las mariposas al tocar el parabrisas se convierten en polvo y cuando el anciano ya no tienen  mariposas se va con su carrito a otra parte, los perros uno se adelanta mucho a su amo y el otro al sentido contrario y se pierde entre las calles.

Muchas veces he pensado si la esperanza es blanca y vuela entre las calles así mismo si la búsqueda de la tranquilidad se encuentra entre los recuerdos de viejas cosas.

Que pequeños somos....

lunes, 11 de febrero de 2013

Citando un Poema.... La Lenta Muerte Llega. de Manuel José Arce Leal


Tengo ganas de un poco de entusiasmo
que no siento hace tiempo.
No sé por qué no sabe a nada vivo
ni el mes, ni la avenida, ni la luz,ni el orgasmo.
En realidad también tengo la culpa
y me declaro honestamente reo de una gris negligencia
que por todo mi cuerpo se pasea
y que de todo mi fervor disfruta.


Pero, además, declaro
que han entrado en mis días muchas gentes
armadas de agresivas pasividades turbias
y han saqueado mis horas una a una
hasta dejarme sólo esta inopia profunda.


Han tomado mis sueños,
mis molares,
mis palabras usuales
y mis vísceras.
Con mis ideas han envuelto carne
y ropa sucia con mi vida íntima.


Protesto.
Yo protesto.


Tengo ganas de un poco
de entusiasmo tardío y trasnochado,
del estricto, del justo y necesario
para morir mi almuerzo.



Video Inspirador..

miércoles, 6 de febrero de 2013

El sol y la Luna


Atrás  del  cerro del cerro del muerto, entre Venaderos y los Caños todas las tardes llega el sol  a descansar después de una jornada laboral ardua; entre los habitantes de venaderos es bien sabido que al recostarse el sol sobre las montañas da un último estirón, iluminando el cerro todos los días con un atardecer jamás visto en ninguna parte.
Con esto el sol recostado voltea hacia el infinito cielo para observar a su compañera y amor de su vida la luna, que aunque sabe que su amor es imposible, antes de dormir le gusta observarla y es bien sabido que la luz de luna aunque es más tenue es más seductora y envolvente, que la luz de día.

El sol en esa pose se cuestiona día con día que es lo que la hace ver tan bella a la luna…. si es su tranquilidad, su romántica figura o ese encanto fatal que envuelve a los seres humanos al desvelo.

Por su parte la luna cuando llega el momento de realizar su trabajo de la cual sale inocente y silenciosa, casi, casi como una niña de 5 años, observa lo tonto y simple que es el sol, tan tosco y torpe pero a la vez fuerte y seguro, eso lo vuelve loco a ella tan loco que muchas noches la luna cuando está más enamorada su luz es más brillantes.
Ella emerge entre San Pancho y Betulia, cabe señalar que son dos orillas opuestas, entonces esto le permite a la Luna y al Sol poderse contemplar de frente.

En algunas ocasiones el sol se desvela ligeramente para poder decirle cuanto la extraña y manda besos cargados de calor (es por eso que algunas noches son cálidas en la ciudad) y con esto la luna se pone roja, roja y es cuando todo mundo observa el cielo y ve a la luna con sus chapetes casi, casi como si estuviera apenada, y es cuando ella se envuelve una parte de ella con un velo obscuro.

También ella se da unas escapaditas y en el día va a observarlo, pero ella es mucho más discreta, se queda en un punto a observarlo calladita para no interrumpir el gran trabajo del Sol y para que descanse un poco se acerca a la tierra para susurrarle a ella, que le mande una nube para que se tome un pequeño descansito.

Y día con día semana con semana los dos enamorados escriben esta sinfonía estelar.